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Pablo Medel

56 femicidios, 3 suicidios femicidas y 2 crímenes contra personas Trans, son parte de las cifras que entrega la Red Chilena Contra la Violencia Hacia Las Mujeres en lo que va de este 2020. Durante los últimos días conocimos el caso de María Isabel Pavez, joven que tras pasar días desaparecida, fue encontrada muerta en el departamento de su ex pareja, quien es buscado por la Policía.

Razones Editoriales conversó de este tema con la activista feminista y candidata a constituyente de Convergencia Social por el distrito 10, Antonia Orellana. “Desde el inicio de las medidas de aislamiento social, se advirtió por parte de distintas veredas, de las consecuencias socioeconómicas de la cuarentena, que iban a conducir hacia una agudización de la violencia contra las mujeres. Porque es un tema estructural, que depende de mucho más que sólo de la relación entre la víctima y su agresor. Hay condicionantes sociales muy importantes”, advierte.

Sobre las cifras al alza, considerando los años anteriores, la dirigente sostiene. “Desde que se tipificó la Ley de Femicidio, y desde que la Red Chilena lleva un registro, siempre las cifras han tendido a aumentar. A medida que avanza la implementación de la Ley, más casos que antes eran calificados como parricidio, como homicidio común, van siendo tipificados bajo la figura de femicidio”, precisa.

Consultada por los cambios que ha experimentado la sociedad chilena en los últimos años respecto a la violencia contra la mujer, Antonia explica. “Estamos viviendo un momento de mayor conciencia social respecto de la violencia contra las mujeres, por lo que han subido los niveles de denuncias. Es difícil saber a qué se debe, lo que sí podemos decir es que en los últimos 30 años, las políticas de prevención no han sido efectivas, porque no ha disminuido la violencia, y menos los femicidios”, sostiene.

Qué es lo que se requiere por parte del Estado, la activista expone. “Este año el presupuesto para el programa de prevención y reparación de la violencia del Ministerio de la Mujer, suma mil doscientos millones de pesos, el último carro lanza agua que compraron para Carabineros cuesta mil millones de pesos. Entonces hay una cuestión que tiene que ver con la voluntad política de dar un presupuesto adecuado a la magnitud del problema”, denuncia la activista feminista y candidata constituyente por el Distrito 10, Antonia Orellana.