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Informe del INDH reveló vulnerable realidad de reclusos en cárceles chilenas

El estudio detalló que el tiempo entre la última comida y la primera entregada el día siguiente puede superar las 16 horas. Por otro lado, las celdas de los reos carecen de servicios higiénicos y camas.

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  • Diario Usach

  • Jueves 20 de enero de 2022 - 11:39

El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) elaboró un informe sobre las Condiciones Carcelarias en Chile, realizando un análisis durante el año 2019 en 44 de los 83 centros penitenciarios del país, en el cual se abordó la situación en las regiones de Valparaíso, Metropolitana, O'Higgins, Ñuble, Biobío y La Araucanía.

En general, el INDH reveló una serie de falencias diferentes sistemas penitenciarios del país. En este sentido, el informe detalló que en 11 de los penales revisados, no existen camas para todos los reclusos, por lo que algunos de ellos duermen en baños, pasillos y suelo.

Asimismo, el estudio señala que "en varias celdas hay camarotes para cuatro personas, situación que implica que quien duerme en la superior queda a centímetros del cielo de la celda".

Así también, el INDH constató que 23 cárceles no poseen acceso a servicios higiénicos al interior de sus celdas. De esta forma, durante el tiempo que pasan encerrados, los reclusos deben realizar sus necesidades en baldes, bolsas u otro tipo de recipientes.

Sumado a lo anterior, en 11 de los 44 recintos de los analizados el INDH identificó la presencia de plagas de ratones, pulgas, chinches, palomas, entre otras especies.

En cuanto a la alimentación de los reos, el informe reveló que el tiempo entre la última comida y la primera porción de alimentos entregada el día siguiente puede superar las 16 horas. Incluso, dentro del penal de Valparaíso, las personas privadas de libertad pueden pasar hasta 20 horas sin comer. 

Por el contrario, en recintos como Punta Peuco, Yungay y Lautaro, el tiempo máximo entre la última comida y la primera del día, es de 14 horas. Por ello, la sitaución es considerada óptima y representa una excepción a la realidad que ocurre en el resto del sistema penitenciario.

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