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Este martes, la fiscal Tania Sironvalle informó que las armas robadas desde el Instituto de Investigación y Control del Ejército fueron 78 y no 56 como se dio a conocer en primera instancia. 

Recordemos que durante esta jornada, Juan Osorio, suboficial en retiro y empleado civil del Ejército fue formalizado por su “participación en calidad de autor en dos ilícitos: tráfico ilícito de armas y robo en lugar no habitado". Al respecto, Sironvalle explicó que el primer delito es grave por lo que “tiene una pena de crimen que va de 5 años y un día a 10 años”, mientras que el segundo tiene una pena de 541 días.

Los antecedentes indican que los ladrones estuvieron en el recinto militar entre las 00.00 y las 01.00 horas, el horario en que el Instituto realiza las entregas por protocolo. Recordemos, además, que Carabineros señaló que “no hubo ingreso a las dependencias militares” y que tampoco se registró violencia. De hecho, se indicó que los responsables del hecho delictual se mantuvieron todo el tiempo en las afueras de las dependencias del Ejército.

La fiscal explicó que el militar en retiro, “para retirar, 78 armas de fuego marca CZ, de origen checo de seis distintos modelos, realizó acciones de fuerza por lo menos en dos puertas de acceso al lugar donde estas se guardaba, incluso activando un sistema de alarmas".

Durante la audiencia, el imputado renunció a su derecho de guardar silencio y explicó que fue engañado con una supuesta llamada de un superior que le ordenó entregar las armas.

Tras esto, el hombre de 70 quedó en prisión preventiva tras considerarse que es un peligro para la sociedad y para evitar una posible fuga.