Pablo Medel
Las autoridades miran con atención el brote de coronavirus confirmado en la Antártica. Se trata de 36 personas contagiadas en la base Bernardo O’Higgins Riquelme. De ellos 26 corresponden a efectivos del Ejército y 10 son civiles de una empresa contratista que realizaban trabajos de mantenimiento programados en la base antártica. Se procedió a la evacuación del personal y a la sanitización completa del recinto.
Para conocer más acerca de las implicancias de la llegada del virus a la Antártica, el programa All You Need Is Lab, conversó con doctor en Ciencias de la Ingeniería e investigador del Grupo de Investigación Antártica Usach, Raúl Cordero. “Desafortunadamente esto va a implicar algunos retrasos en la ejecución de algunos proyectos de investigación. Por ejemplo nosotros teníamos que enviar personal en enero, eso ya no podrá ser, según nos informó el Instituto Antártico Chileno. Tendremos que esperar hasta febrero”, precisa el investigador.
Consultado por las causas que gatillaron la llegada del coronavirus a la Antártica, Raúl Cordero considera. “Es probable que los protocolos empleados no fueron lo suficientemente adecuados, o no se cumplieron adecuadamente. Chile tiene cuatro operadores, las tres ramas de las Fuerzas Armadas y el Instituto Antártico Chileno, que es civil y depende del Ministerio de Relaciones Exteriores. Por ejemplo uno de nuestros investigadores cumplió una estricta cuarentena supervisada por este último, que son los que nos provee la logística. Da la impresión, que el personal contratista que llevó las Fuerzas Armadas no cumplió con esta estricta cuarentena”, advierte.
Sobre cómo impacta esto el trabajo que lleva a cabo el Grupo de Investigación Antártica Usach, el académico cuenta. “Nosotros nos dedicamos a estudiar los cambios en el clima en esa zona, la composición atmosférica. Eso implica realizar mediciones. Por eso para nosotros es fundamental estar ahí, y al no poder hacer las mediciones en enero, esto impacta nuestro trabajo. Sin embargo entendemos lo que pasa, y en este caso lo principal es la salud”, especifica.
Cuándo se retomarán estas investigaciones, el doctor en Ciencias anuncia. “El Instituto Antártico Chileno nos comunicó oficialmente que podríamos entrar a inicios de febrero. Pero todo eso está sujeto a cómo evolucione la situación. Aparentemente el brote está controlado, así que podremos seguir con nuestro trabajo pronto. Esto no es particularmente grave”, concluye el investigador del Grupo de Investigación Antártica Usach, Raúl Cordero.