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Investigación

“Betas”, “Millenials” ,“X” y “Baby Boomers” : ¿Cuál es el trasfondo de las generaciones?

El 1 de enero de 2025 comenzó la categorización que agrupa las personas consideradas nativas en temas como la inteligencia artificial y la tecnología. Pero ¿de dónde y para qué sirven esas etiquetas? Sobre eso conversamos con la psicóloga Johana Cabrera y los sociólogos Dante Castillo y Raúl Zarzuri.

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  • Raúl Gutiérrez Velásquez

  • Jueves 9 de enero de 2025 - 16:53

El pasado 1 de enero dio inicio a una nueva generación de personas: los individuos catalogados bajo la etiqueta  “Beta”. De esta manera, los nacidos entre 2025 y el año 2040 pasarán a formar parte de esta nueva denominación marcada por el fuerte impacto de la tecnología y la innovación

Antes de los “Beta” estuvieron los “Alfa” (nacidos entre 2013 y 2024), los “Z” (1997 - 2012), los “Millenials” (1981 – 1996), los “X” (1965 – 1980) y los “Baby Boomers” (1946 – 1964). Pero ¿cómo se llega a esas denominaciones? ¿y para qué sirven? 

Para Dante Castillo, sociólogo, y académico de la Escuela de Psicología de la Universidad de Santiago, estas denominaciones surgieron desde el mundo del marketing, las comunicaciones y los poderes fácticos: “Aquí lo que se está tratando de hacer es la creación de grupos de consumidores”, sostiene.

El profesor de la Usach señala que “desde pequeños, la mercadotecnia nos va programando para adquirir cosas y, al mismo tiempo, nos va indicando que es lo que nos va a ir gustando. Los intereses económicos mundiales también contratan universidades, sociólogos, psicólogos  y otro tipo de profesionales para poder justificar estudios sobre estos temas, pero esa no es la forma en que la sociología, o la misma economía, clasificaba a los grupos sociales”.

Castillo explica que, antes, los grupos sociales se clasificaban en función de hechos “sociales o históricos fuertes" como la caída del muro de Berlín. Entonces, “de esta manera se pueden estudiar, por ejemplo, cómo es la generación rusa después del término de la Unión Soviética. Y ahí tú puedes analizar ciertas características sobre su pensamiento, sus consumos y su organización. No tomando únicamente aspectos que tienen que ver con la tecnología”.

Raúl Zarzuri, sociólogo y académico de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano (UAHC), coincide con Castillo al indicar que “cuando se habla de generaciones, tendríamos que referirnos, en específico, a hechos históricos puntuales que vive un determinado grupo de sujetos. Por ejemplo, en los ochentas está la generación que en Chile luchó contra la dictadura militar y, antes, la que vivió la reforma universitaria. Entonces, estos conjuntos de individuos se van identificando en función de evidencias que les determinan la vida de determinada forma”.

En conversación con Diario Usach, ambos especialistas coinciden en que esta mirada no va de la mano del concepto comercial que hay detrás de nombres como el de las llamadasgeneración X”, “Millenials”, los “Z”, los “Alfa” y, ahora, los “Beta”.

LOS NUEVOS HUMANOS

Johana Cabrera, doctora en psicología y docente e investigadora de la Escuela de Psicología de la Universidad de Santiago, explica que el nombre de la generación “Beta” fue acuñado por la compañía australiana McCrindle (empresa que se dedicada a los servicios de comunicación) y responde a una “nueva etapa de categorización demográfica que sigue los “Alfa” y que viene marcada por los avances tecnológicos acelerados, transformaciones sociales profundas y desafíos sociales complejos”. 

Si bien la psicóloga reconoce que “es imposible prever con exactitud el futuro, el análisis de ciertas tendencias nos permiten identificar oportunidades y riesgos para estas personas en particular. Este grupo, desde su nacimiento vivirá una inmersión tecnológica relacionada con la inteligencia artificial generativa y tendrá una automatización integrada sobre todo con temáticas de robótica. Eso afectará toda su vida, involucrando la educación, la salud, el trabajo y el entretenimiento”.

A su vez, Cabrera señala que, a pesar del ofrecimiento de temáticas positivas para la eficiencia y el acceso a oportunidades globales, existirán desafíos para, por ejemplo, “evitar la dependencia a la tecnología”. Además, avizora “nuevas problemáticas de salud mental relacionada con los avances y otras problemáticas como la brecha digital y el peligro de una desconexión de la realidad física y social”.

Para Raúl Zarzuri, una etiqueta como “Betasirve para ordenar características de determinados grupos para definir consumos. Y en una segunda línea, está referida a como estos individuos se enfrentan a cuestiones más tradicionales como el trabajo”.

“Por ejemplo, los ‘Millenials’ están identificados como seres que les cuesta fidelizar en sus labores profesionales porque su idea es no estar anclados de manera permanente, algo muy diferente a lo que pasa con las personas etiquetadas como “X”, las que podían estar veinticinco, treinta o cuarenta años en la misma oficina”. 

Ahora, en lo que respecta a los nacidos a partir de 2025, y que están siendo relacionados con el auge de la tecnología digital, el profesor de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano sostiene “que algunos serán nativos de la IA y otros, los que nacieron algunos años antes, migrarán hacia ella. Muchos de nosotros nos estamos moviendo en ese ámbito”.

LA DENOMINACIÓN PARA LAS GENERACIONES

“¿Por qué nombramos a una generación como “Z”, “X” o “Alfa”?, se pregunta Dante Castillo y luego él mismo responde: “esas clasificaciones, en el fondo, tienen como criterio principal a la tecnología por sobre otros aspectos de la sociedad. Antes, cuando se hablaba de los “Baby Boomers”, se hacía referencia a un contexto enmarcado en los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial. O cuando se miraba a los años 20 y 30, se entendía el panorama social y cultural de un mundo empobrecido”.

El académico Usach asevera que esos aspectos, al momento de buscar una nuevas denominaciones, quedaron desligados. Y con esto, “se pueden entender fenómenos como la crisis de la democracia o de representación”. En síntesis, bajo el nombre “Beta” se trata de aglomerar un conjunto de personas que vivirán en sociedades que cada vez se vuelven más individualistas a raíz, justamente, del desarrollo tecnológico.

De esta manera, la antigua práctica de anclar a grupos humanos inidentificables por algún hecho histórico (con la creación de movimientos colectivos), mutó a la conformación de categorías basadas en el consumo

Por lo mismo, Castillo indica que denominaciones de las generaciones más recientes “son bastante artificiosas”. “Más allá de buscar patrones sociales o culturales, se trata de ver en dónde están los gustos y las tendencias para poder hacer acciones como el telemarketing”.

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