El 11 de septiembre de 1973, nuestra casa de estudios fue bombardeada con tanques y miembros de nuestra comunidad fueron asesinados. En 1981, la Universidad Técnica del Estado fue completamente cercenada a nivel nacional e, incluso, se le impuso un cambio de nombre. Vivimos a cabalidad el trauma del Golpe de Estado y experimentamos en carne propia los crímenes de la Dictadura Militar.
Conmemoramos este medio siglo desde aquel sangriento capítulo de la historia de nuestro país, escuchando a las personas que lo padecieron y revisitando documentos que atestiguan los horrores de este cruento régimen impuesto por la fuerza, para nombrar las cosas como son: en Chile hubo violaciones sistemáticas a los Derechos Humanos y negarlo es completamente absurdo.
Solo la verdad y la justicia permitirán que tengamos un Chile sin odio, donde seamos capaces de perdonarnos. Queremos reencontrarnos y trabajar por el futuro de los próximos cincuenta años, reafirmando la importancia de la democracia, porque entendemos que esta conmemoración nos invita a todas y todos, sin excepciones, a valorar, perfeccionar y defender la única manera legítima de construir un destino en común.
Desde el recuerdo, debemos avanzar hacia un Chile distinto y las universidades tenemos mucho que aportar en este proyecto de reencuentro y reconciliación.
Rodrigo Vidal Rojas. Rector Universidad de Santiago de Chile.