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El panorama financiero de las isapres abiertas ha experimentado un cambio significativo en el primer semestre de 2023, con utilidades que superan los $8.933 millones, lo que marca una reversión respecto a las pérdidas de $74.141 millones registradas en el mismo período del año anterior.

Según publica el Mercurio, esta es la primera vez que las isapres exhiben cifras azules desde diciembre de 2020, un año que destacó por utilidades que superaron los $80.000 millones. Sin embargo, el año 2021 fue desafiante debido a la pandemia, lo que llevó a un ejercicio marcado por pérdidas por sobre los $148.000 millones en el sistema privado abierto de salud.

El actual período de ganancias se da en un momento crucial, coincidiendo con el debate generado por un controversial fallo emitido por la Corte Suprema. El fallo determinó que el último reajuste del GES (Garantías Explícitas en Salud) no procede, lo que ha generado discusión y preocupación entre la población respecto al acceso a servicios de salud.

Las empresas que han liderado este cambio en la tendencia financiera han sido Consalud, perteneciente a la Cámara Chilena de la Construcción, que logró ganancias por $10.739 millones, revirtiendo pérdidas por $26.531 millones registradas en junio del año anterior. Le siguió Nueva Masvida, del grupo estadounidense Nexus, que obtuvo $4.161 millones de ganancias, en contraste con pérdidas por $234 millones el año previo.

Vida Tres, bajo el control del grupo Banmédica y su matriz estadounidense United Health, experimentó una utilidad de $878 millones, aunque mostró una disminución del 48% en comparación con los $1.700 millones del primer semestre de 2022. Sin embargo, la otra isapre del grupo, también perteneciente a Banmédica, registró pérdidas por $4.029 millones, una reducción en relación a las mermas de $16.592 millones del año anterior.

Colmena, empresa vinculada al grupo Bethia de las familias Heller-Solari, logró un resultado positivo de $28 millones, en contraste con las pérdidas por $5.128 millones registradas el año anterior. Además, Cruz Blanca, controlada por Upa, mostró una mejora al reducir sus pérdidas de $26.882 millones en el primer semestre de 2022 a un saldo negativo de $676 millones en la primera mitad de 2023.