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La producción de cobre de Antofagasta Minerals, una de las 10 mayores compañías cupríferas del mundo, cayó un 24,2 % en el primer trimestre de 2022 respecto al mismo periodo del año anterior debido a la sequía que afecta al norte de Chile, informó la empresa en un comunicado.

La producción fue de 138.800 toneladas de cobre fino, con un costo neto de caja de 1,75 dólares la libra, frente a las 183.000 toneladas de producción entre enero y marzo de 2021.

“Como ya habíamos informado, esta disminución en la producción respecto al año anterior es el resultado de la prolongada sequía que vive la región de Coquimbo, donde se ubica Minera Los Pelambres, y de una baja en las leyes en la línea de sulfuros de Minera Centinela”, explicó Iván Arriagada, presidente ejecutivo de la minera.

Los resultados van en línea "con las estimaciones entregadas por el grupo para 2022" y por tanto, se "mantiene la meta de producción de máximo 690.000 toneladas a un costo neto de caja de 1,55 dólares la libra este año”, agregó Arriagada.

En el caso de Minera Los Pelambres, un yacimiento de sulfuro en la región de Coquimbo -240 kilómetros al norte de Santiago-, la compañía informó que ha invertido 2.200 millones de dólares en renovación de infraestructura.

Este proyecto, que lleva un 73 % de avance, considera la construcción de una planta desalinizadora que se pondrá en marcha durante el segundo semestre de 2022 para poder "normalizar la capacidad de producción de la mina incluso si las condiciones de sequía se extienden al resto del año".

Chile, donde la minería representa el 10 % del producto interno bruto (PIB), es el mayor productor de cobre del mundo, aglutinando el 28 % del total, y en el país operan gigantes como BHP, Anglo American o Antofagasta Minerals, además de decenas de medianas y pequeñas compañías.

El metal rojo, fundamental en la transmisión de energía, está viviendo una escalada sin precedentes desde hace una década y el pasado 8 de marzo llegó a su máximo histórico al alcanzar los 4,86 dólares la libra, superando el récord anterior de mayo y los registros del "superciclo" de 2011. EFE