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Carabineros informó la recuperación de algunos equipos audiovisuales que fueron robados este martes desde el Estadio Nacional, los cuales se utilizarían para transmitir los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Santiago 2023. Se trató principalmente de televisores y cámaras de televisión.

El director nacional de Orden y Seguridad de Carabineros, general inspector Enrique Monrás, indicó desde el Departamento OS9 que se allanaron dos domicilios, uno en la comuna de La Granja, donde se encontró una cámara y el vehículo usado para el  robo.

Según detalló el oficial, las pericias investigativas se concentraron en revisar las cámaras particulares al exterior del Estadio Nacional, las cuales captaron a "dos personas vestidas con chaleco reflectante, casco y overol".

En esa línea, efectivos hicieron un seguimiento "a través de las cámaras, fueron aproximadamente 20 kilómetros de búsqueda de esta información, y se llega hasta un sector de La Pintana donde se puede ubicar la patente de un vehículo y algunas personas que descienden de él", lo que dio paso a las órdenes de allanamiento.

Según información policial, los delincuentes habrían sustraído más de $200 millones en especies desde las inmediaciones del Estadio Nacional.

Desde la Fiscalía señalaron que se espera esclarecer si los dos detenidos participaron en el robo, por lo que mañana pasarán ante el 8° Juzgado de Garantía de Santiago. Ambos son chilenos mayores de edad, y sólo uno mantiene antecedentes por diversos delitos.

Por su parte, el ministro (s) del Interior, Manuel Monsalve, destacó que en menos de 24 horas se logró "a través de un trabajo de colaboración del Ministerio Público y Carabineros de Chile, a través del Departamento OS9, obtener resultados en materia de seguridad, que son extraordinariamente importantes".

"Hemos acordado, mañana (jueves) a partir de las 14:00 horas, producir un quiebre en materia de seguridad. Este quiebre de seguridad es para impedir que cualquier persona que no tenga, primero, la revisión de antecedentes de la PDI, y en segundo lugar, que no tenga una acreditación oficial con código QR, pueda ingresar al recinto deportivo", agregó.

"Es justamente para evitar que personas, haciéndose pasar por trabajadores, por parte de la delegación, o por proveedores, eventualmente vulneren las condiciones de seguridad del recinto", acotó Monsalve.