Se acabó el gran torneo de Nicolás Jarry (23° del mundo) en el ATP 500 de Beijing, en China. Después de derribar en el debut al 5 del planeta, el griego Stefanos Tsitsipas, y después salvar cuatro match points ante el italiano Matteo Arnaldi, el chileno quedó eliminado en cuartos de final del certamen chino.
El "Príncipe" no pudo ante el 10 del orbe, el alemán Alexander Zverev, octavo cabeza de serie, y cayó por parciales de 6-1, 6-7 (5) y 6-3, luego de dos horas y 18 minutos de un partido donde luchó, insinuó una remontada, pero no le alcanzó.
El nieto de Jaime Fillol entró completamente desconectado al partido, pues en el primer set tuvo un bajísimo porcentaje de primeros servicios y falló mucho, sobre todo con el revés. De hecho, sufrió quiebres en el segundo y cuarto juego para quedar rápidamente 5-0 abajo y recién ganó en el sexto su primer game. En tanto, el germano estuvo sólido con su saque y en el siguiente no titubeó para sellar la manga en apenas 23 minutos.
En el segundo episodio fue completamente diferente, debido a que el nacional entró por fin al cotejo y mejoró considerablemente, sobre todo con su envío. Los dos estuvieron firmes con sus turnos y no entregaron chances de quiebre, por lo que todo se tuvo que definir en un tiebreak, donde el santiaguino se recuperó de un 3-1 en contra y se lo adjudicó por 7-5 para forzar a un tercer capítulo.
En el último parcial el criollo mejoró con la devolución y se generó su primer break point a favor en el tercer game, pero no lo pudo concretar, mientras que en el sexto sufrió una ruptura clave, porque nunca pudo recuperarla.
Con esta derrota, Jarry no pudo alcanzar su primera semifinal en un torneo sobre superficie de cemento y dejó el historial a favor de Zverev 4-2. Eso sí, se despide de Beijing con buenas sensaciones, porque avanzará un lugar en el ranking, al 22, que es su mejor posición histórica, y porque pudo volver a derribar a un top ten.
Ahora, el chileno se alistará para participar en el Masters 1000 de Shanghai, donde en primera ronda quedó libre en su condición de 22° cabeza de serie.