Este jueves el Presidente Gabriel Boric fue parte del segundo Gabinete Pro Seguridad, donde realizaron una evaluación al control de armas en el territorio nacional, además de definir nuevas medidas de corto y mediano plazo en esta materia.
El Mandatario, que volvió de sus vacaciones, fue parte de la segunda sesión del plan, que aborda cinco ejes principales: fortalecer las instituciones, partiendo por las policías; impulsar la política contra el crimen organizado y de control de armas; intervenir los territorios con planes concretos; reforzar integralmente la prevención del delito y alcanzar acuerdos de Estado en seguridad.
En materia de control de armas, la ministra del Interior, Carolina Tohá, señaló que la "mayoría de los homicidios que se comenten en el país tiene detrás un arma de fuego, las cuales se ven circular con más frecuencia de lo que es aceptable".
La secretaria de Estado agregó que "muchas armas que originalmente son legales terminan usándose para delitos y hay contrabando de armas que terminan en manos de la delincuencia, armamentos que además se identifican como imitaciones y que en teoría no son letales, pero sí generan intimidación en la población".
En tanto, el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, detalló el encuentro relevando que "la instrucción clara y directa del Presidente de la República fue profundizar en la tarea de quitar el poder de fuego a delincuentes y al crimen organizado, en ese contexto hoy se le han hecho propuestas al Presidente, y ha tomado decisiones en cinco materias".
El subsecretario indicó que alrededor del 26% de los hogares chilenos escucha disparos que terminan quedando en la impunidad.
Monsalve dio cuenta de que el Presidente instruyó fortalecer la capacidad de control en la frontera para impedir el trafico ilícito de armas, tanto como sus piezas y partes de las mismas en toto el territorio nacional.
El Jefe de Estado también solicitó ampliar y robustecer la fiscalización en materia de armas inscritas legalmente, esto porque de las armas de fuego tradicionales que incauta la policía, un tercio de ellas estuvo inscrita legalmente.
Monsalve señaló que habrá un fortalecimiento de la capacidad de control en la frontera "para impedir el tráfico y ilícito de armas, de piezas y partes de armas. Anualmente se incautan entre 7.200 a 7.300 piezas o partes de armas. El presidente ha decidido hoy ampliar este programa al conjunto del país para que también se impida su ingreso al país".
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