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Ya se encuentra en librerías “El sótano rojo”, el último libro del escritor Jorge Baradit, un thriller político con elementos gore que explora el horror de la dictadura chilena y sus ecos en los primeros años de la democracia.

La novela entrelaza dimensiones temporales y paranormales para narrar la historia de Tamara, una joven estudiante de arquitectura que busca a su madre desaparecida durante la dictadura. A través de psicofonías y médiums, Baradit revive los fantasmas de un pasado oscuro y violento.

Para conocer más acerca de esta novela, la periodista Daniela Figueroa entrevistó en “Frecuencia Pública” de Radio Usach al autor de la saga “La historia secreta de Chile” sobre la inspiración detrás de su más reciente obra y sobre los temas de impunidad y justicia que aún marcan al Chile contemporáneo.

“La historia tiene que ver con eso, con mujeres muy peleadoras, muy luchadoras, y con una historia de horror. O sea, lo que estamos viendo hoy día: una mujer ha sido violada, abusada, y la persona poderosa está sentada ahí, muy tranquila, mientras el resto del país se pregunta, ‘Oye, pero si se tomó tres piscos sour, ¿cómo es que se fue a meter a la casa de un tipo?’ Todavía seguimos cuestionando la violencia contra la mujer”, expresó Baradit.

Sobre la motivación para escribir este libro, el autor comenta: “Hoy hemos descubierto las redes de poder a través de la información que se filtra en redes sociales e internet, este libro es un poco eso, lo que pasa en este país por debajo de la alfombra, lo que hay efectivamente en el sótano”, agregó.

A propósito del género de terror en nuestro país, el escritor comentó que “en Chile no hay terror, porque no hay cómo competir con el informe Rettig o el informe Valech. Los ingleses del primer mundo viven una realidad muy acomodada y tienen que huir hacia la fantasía. Nosotros, al revés, vivimos una realidad tan horrible que tenemos que huir hacia la realidad usando la literatura”.

Finalmente, y sobre su paso por la Convención Constituyente, Baradit comentó: “Hay algo que mucha gente no sabe, pero las personas que salimos de la convención salimos destrozadas, nos hicieron pedazos a todos. Hay gente que todavía no se recupera económicamente, me incluyo, hay gente que quedó sin trabajo, que la persiguieron, que la cancelaron. Ha sido un infierno”, sentenció.