Cultura

Los asistentes al show de Paul McCartney en el estadio Monumental de Santiago vivieron una fiesta gracias al contundente espectáculo que el exbeatle realizó en suelo nacional. En casi tres horas de concierto, el británico pareció olvidar que ya tiene 82 años y brindó un concierto de altísima factura, sin puntos bajos, y con una energía que ya se la quisieran artistas más jóvenes.

El recital, enmarcado en su gira “Got Back Tour” comenzó con cerca de 15 minutos de retraso (estaba fijado para las 21.00 horas) y tras una espera que fue amenizada por los chilenos Denver. 

Tras un largo video introductorio, sir Paul salió al escenario que se instaló en la galería norte del recinto deportivo de Colo Colo acompañado de la banda que tiene hace varios años: los guitarristas Rusty Anderson y Brian Ray, el multinstrumentista Paul Wickens y el carismático baterista Abe Laboriel Jr.

Saludó en español (dijo “hola chiquillos y chiquillas”), en medio de la algarabía, y comenzó un repertorio de 37 canciones que se inició con “Can’t buy my love” y que luego siguió con “Junior’s Far”, “Letting Go”, “Drive My Car”, “Got to Get You Into My Life”, “Come On to Me”, “Let Me Roll It”, “Getting Better” y así. Más adelante interpretó clásicos de su repertorio como “Let’ Em In”, “Maybe I’m Amazed”, “Let Me Roll It” y “Here Today” dedicada a John Lennon.  Durante el show también interpretó éxitos de The Beatles como “Love Me Do”, “Blackbird”, Lady Madonna”, “Being of the Benefit of Mr. Kite!”, “Somethig” (con su ya característica interpretación con ukelele y su saludo a George Harrison), “Now and Then (la canción más reciente de los “fab four”), “I Got a Feeling” (con la aparición de John Lennon en video), “Hey Jude” y “Live and Let Die” (con pirotecnia incluida).

Muchas bromas, interacciones en español, y su carisma único conquistaron a una audiencia que terminó siendo mucho más activa que la que el inglés tuvo en sus anteriores visitas a la capital (el 16 de diciembre de 1993 (Estadio Nacional), el 11 de mayo de 2011 (Estadio Nacional), el 22 y 23 de abril de 2014 (Movistar Arena) y 20 de marzo de 2019 (Estadio Nacional)).

La gente  (incluido el Presidente Gabriel Boric) disfrutó, coreó las canciones y celebró cada una de las interacciones que McCartney tuvo con ellos. ¿Signos de cansancio? A simple vista, ninguno.

Paul McCartney sigue demostrando que, para él, 82 años, no son impedimento para perder su calidad histórica y esa misma factura es la que pretende seguir en el resto de su tour internacional. 

Tras su concierto en Chile, viajará hasta Brasil para presentarse en Sao Paulo y Florianópolis. De ahí su ruta lo llevará hasta Córdova en Argentina, Lima en Perú, Bogotá en Colombia y San José en Costa Rica. De ahí, saltará a México para hacer cuatro conciertos.