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“Cuando la derecha o centro derecha o Chile Vamos gana elecciones, no es por razones ideológicas, es porque el otro, el que vino antes, lo hizo mal”, señaló el senador de la UDI por la Región de Los Lagos, Iván Moreira, en entrevista con Profundidad de Campos de TvSenado.

Con casi tres décadas de experiencia legislativa como diputado y senador, para el parlamentario está claro que en el último proceso constitucional, la extrema derecha mayoritaria no supo aprovechar la oportunidad política de aglutinar más gente y lograr aprobar una nueva carta fundamental.

“No se trata de pelear con Republicanos, pero tenemos que mantener distancia, porque tenemos que seguir dialogando para llegar a acuerdos importantes para el país", dijo.

"Hoy una parte de la sociedad chilena no se siente identificada políticamente y los partidos de Chile Vamos tenemos que tener una mirada para ampliarnos, representar a ese centro, a esa derecha, a esa clase media que legítimamente no está representada”, añadió.

Además, admitió que “esa extrema derecha de la que fui parte en el pasado, le termina haciendo daño al país” y afirmó haber experimentado un cambio.

Aseveró que hoy es un hombre de derecha moderado, y enfatizó que no renuncia a sus principios “en un Chile que es de centro izquierda, aunque haya algunos que no lo quieren entender”.

En materia de seguridad, el senador Moreira destacó que “a pesar de que el avance de la agenda fast track se ha demorado por cuestiones ideológicas del gobierno, valoramos que hoy las policías, los fiscales y la justicia en general, cuenten con las herramientas legislativas para enfrentar delitos como el sicariato, los secuestros, las usurpaciones”.

A juicio del legislador ya no se necesitan más leyes, sino que aplicar la ley y entregarles cada día más atribuciones a las policías para respaldar su actuar.

“Para enfrentar al crimen organizado, que tiene armas de guerra, obviamente no puede ser con partes de cortesía. Si hay que enfrentarlos a balazos, a balazos hay que enfrentarlos, pero dentro de los protocolos y del marco institucional que nos hemos dado legislativamente para que no se cometan abusos”, graficó.

“Nosotros sabemos que la mitad de la delincuencia que hay en Chile es extranjera. No se trata de estigmatizar la inmigración, pero ese nivel de importación sofisticada de tipos de delitos como robos, lavados de dinero son cosas que hay que investigar y darle más atribuciones a las fiscalías”, afirmó el congresista.

Sobre el papel de las Fuerzas Armadas en materia de orden interno y lucha contra la delincuencia, el senador Moreira fue enfático en señalar que ese es rol de Carabineros y la PDI.

“No es función de las Fuerzas Armadas el orden interno. No podemos exponerlas una vez más. Ellas no están dispuestas a pasar otros treinta años desfilando, por acusaciones de abusos a los derechos humanos, por los tribunales de Chile”, apuntó.

Partidario de subir la Pensión Garantizada Universal (PGU) a 250 mil pesos, en materia de fondos previsionales, la autoridad planteó que el sector político que representa, sí está dispuesto a seguir conversando y llegar a acuerdos para una reforma afirmando que situaciones como el caso Convenios generan inquietudes.

“No hay confianza en este gobierno. Queremos un pacto fiscal, queremos una reforma tributaria para qué ¿para que terminemos como lo que ha sucedido con las fundaciones y las platas gastadas?”, cuestionó.

El representante de los Lagos también reconoció que el sistema de AFP falló haciendo una autocrítica por haber rechazado la propuesta legal de una AFP estatal presentada durante el segundo gobierno de Michelle Bachelet. 

"No queremos que haya un solo ente estatal que recaude y pague las pensiones. Estamos abiertos a que haya un ente público y un ente privado que administren, entreguen pensiones y recauden, pero donde usted decida dónde va su plata. Hoy no hay posibilidad de elegir”, afirmó.

Luego de que la Comisión de Salud despachara a su par de Hacienda, el proyecto de ley corta de isapres, el legislador planteó que “la iniciativa no resuelve la crisis en que se encuentra el sistema. Es grave lo que está pasando con las Isapres, no por lo que les pase a ellas, sino porque van a haber 3 millones de chilenos que prácticamente se van a quedar sin debida salud. El sistema no está preparado para recibir a esta cantidad de personas si quiebran las isapres”.

La salida que ve el senador es buscar una solución equilibrada apuntando a “las responsabilidades compartidas. La Asociación de Isapres, hasta ahora, no ha planteado propuestas y ha adoptado una postura como diciendo soluciónenme ustedes el problema”.

“Es necesario recalcar que en Chile no existe la cultura del seguro de salud. Y cualquier seguro de salud, si llegan a quebrar las isapres, jamás va a dar los beneficios que tienes en éstas”, concluyó el parlamentario.