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Una serie de reuniones están sosteniendo autoridades y profesionales del Ministerio de Obras Públicas en la Región de Valparaíso, para avanzar con el proceso de demolición de viviendas, que se inició la semana pasada en los sectores afectados por el megaincendio del 2 de febrero pasado.

Tras la decisión del Gobierno del Presidente Gabriel Boric de financiar y ejecutar las demoliciones necesarias en las áreas afectadas, el MOP inició un trabajo a través de la Dirección de Arquitectura para generar los contratos requeridos y tomar contacto con las comunidades para coordinar la acción con ellos.

Yanino Riquelme González, seremi de OO.PP., explicó que se trata de llevar adelante un proceso conjunto con las personas.

“Queremos reiterar que estamos llevando adelante un trabajo conjunto con la comunidad y las municipalidades que emitieron los decretos de demolición. Los contratos de demolición tienen una duración de 90 días, pero se van haciendo por etapas, por sectores dentro de los mismos barrios. Es decir, el sector El Olivar tiene 8 subsectores definidos; Villa Independencia tiene 8 también; y Los Almendros tiene 7, por ejemplo”, explicó el seremi.

Además, la autoridad regional informó que hay 3 empresas ya trabajando en las demoliciones: Roberto Silva EIRL en los edificios de Quilpué, en Costa Sol; M. Cueto, en el caso de Villa Independencia, Los Almendros, Lomas Latorre, las casas de Quilpué y las casas de Villa Alemana; y la empresa San Nicolás, en el caso de El Olivar.

Por su parte, la directora regional de Arquitectura MOP, Alejandra Vio Gorget se refirió a la forma en que se está desarrollando el trabajo en terreno.

“Los trabajos tienen una secuencia por sectores. Lo primero que se hace es conversar con la ciudadanía o con los vecinos del barrio y del sector para levantar sus necesidades y poder priorizar. La priorización tiene que ver con la futura instalación de viviendas de emergencia o con el riesgo de la construcción”, dijo.

“Se ha definido una secuencia de más o menos dos semanas por sector. Vamos trabajando de acuerdo a lo definido por las Direcciones de Obras de Viña del Mar, Quilpué y Villa Alemana. Estamos trabajando con medidas de mitigación para la comunidad, por ejemplo, se incorpora la humidificación de las zonas a demoler y, en algunos casos cuando son demoliciones masivas, también la instalación de mamparas de protección que están hechas con malla raschel”, añadió.

“Respecto del ruido, los trabajos de demolición se van a realizar en horario laboral, sin afectar el horario de descanso o de ocio. Son ruidos puntuales, que no permanecen en el tiempo y no transgreden la normativa. En el caso de que existan sectores donde el ruido sea continuo, se instalarán mamparas”, agregó la directora.

Las autoridades recalcaron que se están haciendo reuniones con grupos de vecinos por zona para explicar, resolver dudas y anticipar la entrada en los territorios donde se deben demoler las viviendas.