Deporte

De la mano de un inspiradísimo Lionel Messi que sigue batiendo récords, Argentina “le pasó por encima” a Croacia y lo goleó por 3-0, accediendo a su sexta final en una Copa del Mundo, donde tratarán de resarcirse de la derrota sufrida ante Alemania en Brasil 2014.

Luego de un inicio relativamente equilibrado, con los europeos aguantando los embates del rival, los trasandinos abrieron la cuenta tras un discutido penal cobrado por Daniele Orsato. Lionel Messi (33') fue el encargado de ejecutar la pena máximo y con un potente disparo puso por delante a su equipo y, de paso, se convirtió en el máximo anotador de su país en mundiales.

Y no es todo lo que lograría el 10 con su presencia ante los pupilos de Zlatko Dalic, ya que también se convirtió en el futbolista con más encuentros en este tipo de torneos, igualando la marca del alemán Lothar Matthäus (25) y lo más probable es que rompa el récord en la final.

Apenas cinco minutos más tarde caería el segundo para los dirigidos de Lionel Scaloni. Los sudamericanos armaron un contragolpe aprovechando un córner desperdiciado por el rival y la pelota le quedó a Julián Álvarez, que entró con todo en el área y anotó picando la pelota a la salida del portero.

Con la obligación de dar vuelta el marcador, los europeos salieron con todo en búsqueda del descuento, pero fueron los argentinos quienes contaron con las mejores ocasiones y estuvieron cerca de estirar las cifras con un tiro de Messi (57'), bien contenido por Dominik Livakovic.

Pero la escuadra latinoamericana no tardaría en estirar las cifras y lo conseguiría luego de una gran jugada individual de la "Pulga", que hizo lo que quiso con Josko Gvardiol y sacó un pase para Álvarez (68'), que con un sutil toque de balón sentenció el duelo ante los croatas.

Con este resultado, Argentina sacó pasajes para la definición del torneo que se disputará este domingo, aguardando por conocer a su rival, que saldrá de la llave de Francia y Marruecos. Croacia, en tanto, jugará este sábado ante el perdedor del choque entre galos y africanos, por el consuelo del tercer lugar.