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La Canasta Básica de Alimentos experimentó un aumento del 1,6% mensual durante el mes de junio de 2024, alcanzando un valor de $68.367. Este incremento fue impulsado principalmente por el alza en los precios del tomate y la lechuga, aunque el limón registró una baja en su precio.

El informe, emanado desde el Observatorio Social del Ministerio de Desarrollo Social, reveló que de los 79 productos que componen la canasta, 14 redujeron su precio en un promedio del 2,9%, con descensos que oscilaron entre el -20,8% y el -0,2%. Por otro lado, 65 productos, representando un 82% del total, experimentaron un aumento de sus precios, en un contexto donde el Índice de Precios al Consumidor del mes fue de -0,1%.

Para dialogar respecto a la variación de estos precios, Mirna Schindler entrevistó a Daniela Acuña, subdirectora de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias del Ministerio de Agricultura (ODEPA). Al respecto, la máster en Medio Ambiente comentó que “es importante siempre buscar alternativas y tratar de diversificar lo que uno come, buscando alternativas más económicas, cotizar. Además, es importante que al comprar los alimentos, hay que revisar y buscar, no desperdiciarlos”.

En particular cómo afectaron los precios a ciertos alimentos, la personera de Gobierno sostuvo que “los fenómenos climáticos afectaron los precios de la lechuga, por ejemplo, pero esperamos que esto se normalice porque son cultivos de rotación rápida. Las hortalizas de hoja que estaban en terreno donde hubo inundaciones también sufrieron alzas, porque hay menos oferta disponible. Por otra parte los tomates que estamos consumiendo son de Arica y eso tiene un costo de traslado, al igual que los pimentones que también vienen de allá”.

En cuanto a los productos internacionales estos obedecen a las políticas de abastecimiento advirtió. “Por ejemplo, los aceites han tendido a estabilizarse luego de un año de alzas. Por otro lado, las exportaciones de aceite de oliva han subido un 22% y eso ha incrementado los precios en Chile, porque es más conveniente vender afuera”, detalló.

Por otro lado, la subdirectora de ODEPA también se refirió a que en el ministerio, se encuentran trabajando en una agenda que pueda otorgarle mayor seguridad laboral al sector agrícola en medio del cambio climático, comentando que “estamos buscando generar mayor resiliencia en los medios de vida de los agricultores. Cómo podemos seguir produciendo alimentos en este escenario. En junio recién pasado se aprobó por el Consejo de Ministros por la Sustentabilidad el Plan de Adaptación al Cambio Climático del sector silvoagropecuario. Y este plan tiene 12 medidas con 65 acciones para implementar de aquí a cinco años que van a permitir que el sector sea más resiliente al cambio climático”, reveló.